lunes, agosto 09, 2010

Salgado aboga por retrasar la edad de jubilación de forma "gradual" a los 67 en el 2030 como en Holanda

La vicepresidenta económica del Gobierno, Elena Salgado, apuesta por retrasar de forma "muy gradual y progresiva" la edad de jubilación desde los 65 años en los que está fijada actualmente y ha rechazado que desde el Ejecutivo se vaya a imponer una edad límite para dejar de trabajar. Además, en una entrevista en TVE, también se hcambio de modelo económico que promueve el Gobierno permitirá que España cree empleo "sin necesidad de crecer a un ritmo del 2%" del Producto Interior Bruto (PIB).
Un día después de que el presidente, José Luis Rodríguez Zapatero, confirmase en el Congreso durante el debate de la nueva Ley de Economía Sostenible que se van a promover los incentivos para retrasar la jubilación, la ministra Salgado ha recordado que, aunque España tiene una de las edades de jubilación efectiva de las más altas con una media de 63,5 años, también registra una esperanza de vida de las más altas. "Puesto que la esperanza de vida ha aumentado, lo razonable es que la vida laboral también crezca", ha insistido antes de justificar que "cualquier sistema de pensiones tiene que plantearse el largo plazo".
Por este motivo, la vicepresidenta segunda ha defendido la necesidad de retrasar la salida del mercado laboral, en línea con lo que están haciendo el resto de países europeos como Holanda (67 años), de aquí a 2030, fecha hasta que está garantizada la viabilidad del sistema español de pensiones contando con el fondo de reserva. "No hemos establecido una edad límite porque creemos que tiene que ser muy gradual y lo razonable es que se vaya incrementando gradualmente", ha explicado.
Sobre la modificación del sistema del pensiones, Salgado ha adelantado que el Pacto de Toledo, foro encargado de velar por su viabilidad y analizar su reforma, presentará en breve un avance con sus propuestas. Por otra parte, ha anunciado que, dentro de este proceso por retrasar la edad de retiro, el Gobierno va a ser "muy exigente con las prejubilaciones", ya que, en su opinión, "se han utilizado de manera no sostenible".
Así, la vicepresidenta segunda se ha mostrado confiada en que los cambios en el modelo productivo permitirán dejar atrás la premisa de que España necesita crecer más de un 2%, incluso un 3%, para crear empleo de forma estable por su estructura económica. Un modelo muy intensiva en mano de obra y, al mismo tiempo, dependiente del ciclo, por lo que crea muchos puestos de trabajo en épocas de bonanza y los destruye con la misma intensidad en tiempos de crisis.

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