Autora: Joanna Yarrow Editorial: Blume 128 páginas 14 x 17 cm Año 2008 Precio 6,50 €
Cientos de consejos prácticos para combatir el cambio climático, organizados por temas: aislamiento, irrigación, desplazamientos, reciclaje, y muchos más. Con un gran número de cifras y estadísticas que te proporcionarán una idea de la cantidad de energía que puedes ahorrar. Preguntas y respuestas sobre los beneficios medioambientales que se obtienen de cada consejo de ahorro de energía.
La guía necesaria para minimizar el impacto que tus acciones tienen sobre el medio ambiente. Con abundante información y consejos prácticos, aprenderás de la mano de profesionales a cambiar tu estilo de vida para hacerlo más sostenible. Descubre cómo viajar y desplazarte de forma responsable, y todo lo que puedes hacer en casa y el trabajo para reducir la contaminación y los residuos.
Existen formas de ahorrar energía que no afectan a tu calidad de vida. Tanto si se trata de un simple cambio de hábitos como de un proyecto de mejora del rendimiento energético de tu hogar, tienes a tu alcance un gran número de opciones y sugerencias que demuestran que un estilo de vida sostenible no sólo es bueno para el planeta y tu economía, sino también para tu salud y tu bienestar espiritual.
1 2 3
Los aficionados a las plantas también deben aprender buenas prácticas que logren reducir su huella de carbono, que es como se conoce a la contribución individual al efecto invernadero 08/11/2008
>> Septiembre. Muchos jardineros se sorprenderían si se calculara su elevada contribución al cambio climático. A pesar de que las plantas que cultivan ayudan a absorber CO2, hasta llegar al jardín y prosperar en él, han sufrido tantos transportes, fumigaciones y tratamientos que han de trabajar muchos años hasta paliar sus efectos. La fabricación de la maceta, el procesamiento de la tierra, la elaboración de los fertilizantes y su posterior efecto contaminante en el agua, junto con los kilómetros de transporte hasta el vivero y, posteriormente, hasta nuestra casa, suponen una suma muy negativa par a el medio ambiente.
A todo ese conjunto contaminante que conlleva una acción humana se denomina “huella ecológica” y está en la mano del jardinero reducirla al máximo. ¿Cómo es posible? Por ejemplo, ahorrando en el riego, abonando solo cuando sea necesario, multiplicando las plantas él mismo en lugar de adquirir una nueva o intercambiado ejemplares para evitar comprar otros nuevos.
Más información, en el libro “365 soluciones para reducir tu huella de carbono”, de Editorial Blume.
No hay comentarios:
Publicar un comentario