Belloch defiende los méritos de Escrivá y crea un cisma en el PSOE El alcalde acusa a la izquierda de "sectaria" y avala el cambio con o sin consenso.

Belloch defiende los méritos de Escrivá y crea un cisma en el PSOE. El alcalde acusa a la izquierda de "sectaria" y avala el cambio con o sin consenso. Lambán, Piazuelo y otros socialistas aragoneses exigen al primer edil que rectifique. 13/02/2009 M. VALIENTE . comentarios ()
El alcalde de Zaragoza, Juan Alberto Belloch, defendió ayer con pasión el cambio de nombre de la calle General Sueiro por el de San Josemaría Escrivá de Balaguer. Con devoción, elogió los méritos del santo, al que describió como "uno de los aragoneses más importantes de la segunda mitad del siglo XX", y acusó a la izquierda de la ciudad de "sectaria" por criticar con vehemencia esta arbitrariedad del alcalde.
La decisión de Belloch provocó ayer un cisma en el seno interno del PSOE y suscitó un aluvión de críticas tanto del presidente de la DPZ, Javier Lambán, como de otros diputados socialistas y, fuera de micrófonos, entre la mayoría de los concejales del PSOE del Ayuntamiento de Zaragoza. Exigen al alcalde que recapacite y rectifique.
Belloch aseguró no entender la polémica suscitada por el compromiso personal que adquirió con el patronato del colegio Miraflores, vinculado al Opus Dei, y tildó las críticas de "disparate". En cualquier caso, insistió en que seguirá adelante con su propuesta con o sin consenso. "A un hombre no se le pone por consenso una calle, sino por méritos, y un santo tiene méritos, nada menos que eso, ser santo", subrayó. A juicio del alcalde, en Zaragoza "somos más papistas que el Papa" y, utilizando los mismos argumentos que el consejero de Grandes Proyectos y Cultura, Jerónimo Blasco, recordó que la ciudad tiene una calle dedicada a Carlos Marx y "no hay ningún antimarxista culto que se oponga a eso".
PP, CHA e IU lamentaron ayer la ruptura unilateral del consenso en la designación de 43 viales que llevan nombres vinculados al golpe de estado de 1936 y al alzamiento franquista por un "empeño personal" del alcalde. IU y CHA recogerán firmas contra esta medida.
El presidente de la DPZ y secretario general del PSOE-Zaragoza, Javier Lambán, animó ayer a Belloch a "recapacitar, reflexionar y rectificar" por considerar "improcedente" quitar una calle con nombre franquista y dársela a Escrivá de Balaguer. "Es inoportuno sustituir al cómplice de un genocidio por alguien que dio cobertura al régimen", argumentó. En este sentido se pronunció también el diputado del PSOE y exconcejal de Zaragoza, Jesús Sarría, quien añadió que "en un ayuntamiento, caprichos, ninguno. Como exconcejal lamento no estar en el próximo pleno para poder votar en contra". Muy crítico fue también públicamente el diputado Antonio Piazuelo, quien remitió una carta abierta al alcalde en la que tilda de "vergüenza" la propuesta de Belloch . Ni uno solo de los ediles de Zaragoza se atrevió a opinar públicamente en contra del primer edil.
En el grupo de Facebook No a la calle San Josemaría Escrivá de Balaguer en Zaragoza se registraban ayer por la tarde casi 700 miembros. Entre las personas o agrupaciones que se han adherido contra la iniciativa de Belloch destacan el PSOE de París, en boca de su secretario de Comunicación; las Juventudes Socialistas de Alcalá de Henares; el PSOE de Ronda; el PSC de Sabadell; las Juventudes Socialistas Gallegas; María Elboj --hija del alcalde de Huesca, Fernando Elboj y miembro de la Agrupación Socialista de Huesca--; Carla Antonelli; o las actrices Pilar Bardem y Luisa Martín.

El alcalde desata una tormenta interna en el PSOE por la calle a Escrivá de Balaguer. El diputado Piazuelo discrepa en público y varios concejales piden voto secreto El PAR exige que se aplacen las nuevas denominaciones de las calles franquistas. M. LÓPEZ/N. ASÍN/J. MORALES
La decisión unilateral del alcalde de Zaragoza, Juan Alberto Belloch, de sustituir el nombre de la calle del General Sueiro por el de san Josemaría Escrivá de Balaguer ha causado una verdadera tormenta interna en el seno del PSOE. Destacados dirigentes socialistas han mostrado su disconformidad con la decisión, como el histórico diputado socialista Antonio Piazuelo, que en una carta pública a Belloch ha calificado la decisión de "vergonzosa".
El estupor que ha causado en las filas socialistas esta decisión, que no cuenta con el consenso de los grupos, ha recorrido todo el partido, sobre todo en el PSOE municipal, donde hay varios concejales que defienden soluciones como el voto secreto en el pleno para no verse obligados a respaldar una propuesta que va en contra de sus principios. Además, el conflicto se produce justo en un momento en el que crecen los enfrentamientos en el PSOE zaragozano por el control de la futura ejecutiva local.
"Lógicamente hay un posicionamiento contrario de mucha gente, pero no es un tema sencillo de solucionar. Se está complicando mucho la cosa y no sé lo que puede pasar", explicó un edil socialista absolutamente contrario a la decisión del alcalde.
Aunque todavía no se ha producido ninguna reunión de grupo para analizar la situación, las voces críticas no se han hecho esperar y algunos concejales no descartan romper la disciplina de voto si la propuesta de los nombres de las calles llegara al salón de plenos. Los ediles discrepantes se agarran a la libertad de voto y apelan a los mecanismos internos del partido para encontrar una solución que, sobre todo, no escenifique las diferencias dentro del grupo municipal. "Los asuntos de indisciplina se debaten en los órganos de partido", explican. Como mejor salida, apuestan por una votación secreta en el pleno.
Pero las críticas a la decisión del alcalde no se limitan a la posición que tomarán en el pleno, sino que van más allá y acusan directamente a Belloch de ser el responsable de que se rompa la disciplina de voto en el grupo. "Esperamos que al final entre la cordura", animaron desde las filas socialistas.
Fuera del Ayuntamiento, el gran protagonista fue el histórico dirigente socialista Antonio Piazuelo, ex concejal y diputado autonómico, que ha dirigido una carta a los medios de comunicación en la que califica la decisión de Belloch de dedicar una calle a Escrivá de Balaguer "de vergüenza para todos los ciudadanos de Zaragoza que en su momento votamos PSOE". "Yo, al menos, me siento traicionado, vejado y dolido", afirmó. "Si se trata de un compromiso personal del alcalde, en los jardines particulares caben un sinfín de exvotos, plegarias y ofrendas.
Pero la ciudad es de todos y, para estos gestos de gobierno es importante la unanimidad", llegó a decir de su compañero de partido.
Lamentó que se haya aprovechado el cambio de denominaciones de las calles franquistas, tal y como exige la Ley de Memoria Histórica, para dedicar una calle a Escrivá de Balaguer, de quien dijo que "quitaba y ponía ministros en la época franquista y alardeaba de un dominio casi absoluto de los hilos de la dictadura". Destacó que el programa socialista es contrario a los valores del Opus Dei. "Nada que ver su idea de progreso y justicia social con la defendida por el PSOE", declaró.
A preguntas de este diario, dijo que su posición la defiende "una abrumadora mayoría de su partido". "Es un fraude de ley", declaró.
Preguntado sobre si tendrá efectos electorales la decisión de Belloch, afirmó que "si va de alcalde, será el alcalde de mi partido y le votaré". Pero subrayó el "si va de alcalde". "Lo tendrá que decidir el partido. Yo solo hablo de Escrivá de Balaguer", concluyó.
Estas palabras dejan entrever las numerosas voces contrarias a Belloch en el PSOE, incluso de quienes preferirían que no repita como candidato. Un diputado socialista en Madrid llegó a decir ayer que "con alcaldes como este dan ganas de pasarse al grupo mixto.
El socio de gobierno del PSOE en el Ayuntamiento, el PAR, que también mostró su malestar por esta decisión "personal" del alcalde, exigió que se aplacen las modificaciones en el callejero hasta que la situación económica mejore. Tanto desde el pequeño comercio, como desde CEPYME-Aragón y la Confederación de Empresarios se han manifestado en contra del cambio de las denominaciones por el elevado coste que supondría para empresarios y comercios y la desorientación en la clientela. El concejal de Cultura, Jerónimo Blasco, anunció que estudiará esta petición, pero recordó que se están elaborando medidas para hacer más fácil la implantación. "Habrá un periodo transitorio de uno o dos años", dijo.

La estructura federal y autonómica del PSOE calla. 14/02/2009 A. IBÁÑEZ Poco importa que denigrara a la mujer prefiriéndola callada y discreta, que tejiera redes cómplices con el franquismo, que se opusiera al progreso y que gran parte de su ideario exigiera obediencia acrítica y mortificación. Para las estructuras orgánicas del PSOE federal y autonómico, no se puede alzar la voz contra el "compromiso personal" del alcalde de Zaragoza para cambiar el nombre de la calle General Sueiro por el de San Josemaría Escrivá. Amparados en una presunta "autonomía municipal" tanto el secretario general del PSOE aragonés, Marcelino Iglesias, como la secretaria de organización de los socialistas españoles, Leire Pajín, declinaron ayer valorar la decisión de Belloch. Los líderes más relevantes, al igual que los concejales del PSOE en el consistorio (algunos con un activo pasado izquierdista y otras declaradas fervientes feministas) optan por el silencio cómplice. Tan solo algunas voces destacadas han criticado la alcaldada. Estas son --entre otras-- las del secretario general de los socialistas de Zaragoza, Javier Lambán, o el diputado autonómico y secretario general del PSOE-Delicias, Antonio Piazuelo. Fuentes cercanas a Iglesias coincidieron con el círculo de Pajín al señalar que esta polémica no debería trascender "del ámbito municipal". La vicepresidenta del Gobierno, Fernández de la Vega, aseguró ayer que el Gobierno tendrá que respetar la decisión que adopte el pleno del Ayuntamiento de Zaragoza.